Dios mio tengo un "fans" que emoción... (aunque sea el puto homofobo de Gablin...) en fin que la tercera parte estaba escrita, sólo que no encontraba un rato libre para buscar fotillos que la acompañasen. No creo que te guste como las anteriores porque en esta parte me centro mucho en desgranar la versión que hizo Francis Ford Coppola, aún así, aquí la tienes (tenéis) espero que os guste...
3ª parte: Las adaptaciones cinematográficas
Drácula es, quizás, el personaje acerca del que más películas se han hecho en la historia del cine, pero nos vamos a centrar en las más importantes (y no, Brácula, Condemor de la pradera no es una de ellas)
La viuda de Bram Stoker denunció a los responsables de Nosferatu el vampiro (Murnau, 1921) porque, a pesar de ciertos cambios insignificantes, estaba claramente basada en el texto de su difunto esposo. Afortunadamente no se llegó a cumplir la condena que impuso un inconsciente juez y por la que ordenó destruir todas las copias de la película, y hoy día podemos disfrutar de esta joya del cine mudo.
Alrededor de la obra de Murnau se han creado muchos mitos y leyendas sin aclarar. Por ejemplo, nada se sabíe del protagonista principal, Max Schreck, ni de donde vino, ni dónde fue ni que hizo con su vida. Algunos dicen que era el propio Murnau disfrazado que utilizó un nombre falso para dar vida al protagonista de su película. En La sombra de un vampiro (Elias Merhige, 2000) que recrea el rodaje de la película se plantea la interesante hipótesis de que Max Schreck (interpretado por Willem Dafoe) era un vampiro en realidad. Vampiro o humano lo cierto es que todo lo que sabemos de Schreck es que surgió de la nada, dio vida a Nosferatu y que sus huellas se pierden desde ese mismo momento.
La versión cinematográfica más popular es, quizás, la que Tod Browning hizo en 1931. En esta película aparece por primera vez Bela Lugosi, el actor que más veces daría vida al famoso conde y que popularizaría su imagen más estereotipada: pelo engominado, mirada enigmática, capa negra y frac.
Curiosamente, el Drácula de Browning no está basado en la novela de Bram Stoker, sino en la adaptación teatral que de ella hicieron Hamilton Deane y John L. Balderstone y que influyó decisivamente en el montaje final de la película, más cercana al teatro que al cine salvo en su secuencia inicial. La leyenda dice que Lugosi terminó sus días completamente loco y convencido de ser el conde Drácula. Lo que si se sabe con certeza es que tras su muerte, en 1956, fue enterrado con la ropa del personaje que le hizo pasar a la historia.
Junto con Lugosi, el Drácula más conocido es Christopher Lee. Popularizó el personaje en la revisión que la Hammer hizo del mito. La primera vez que Lee interpretó al mítico conde fue en Drácula (Terence Fisher, 1958). Drácula, príncipe de las tinieblas (Terence Fisher, 1966) está considerada una de las mejores películas de terror que produjo la Hammer y de las que se ha hecho nunca sobre el personaje, precisamente porque se olvidaron por completo de la novela y tejieron una historia nueva pero conectada a la original.
En Drácula, príncipe de las tinieblas, dos matrimonios pertenecientes a la burguesía inglesa viajan por la Europa del Este y deciden pasar la noche en un castillo del conde Drácula. El criado que les recibe asesinará a uno de los hombres y utilizará su sangre para resucitar al Conde Drácula, que más tarde, vampirizará a la esposa del asesinado. El otro matrimonio se refugiará en un monasterio hasta el que serán perseguidos por el Conde. A pesar del evidente espíritu comercial de la película, plantea algunas paradojas interesantes respecto a la historia original. En la novela de Bram Stoker, Drácula es el extranjero sembrando el terror en tierras ajenas, en la película, los protagonistas viajan hasta los dominios del conde, hasta lo desconocido, y manifiestan su desprecio por una región y una cultura que consideran inferior. El terror en esta película procede de la sensación que tienen los personajes de estar lejos de su hogar y en medio de una región que no conocen y de una amenaza que les puede.
En 1992, Francis Ford Coppola dirgió otra versión de la novela de Bram Stoker. Tras su estreno, la crítica se dividió, para muchos era una obra maestra, para otros, la prueba de las horas bajas por las que atravesaba el director de El padrino y Apocalypse Now. La película de Ford Coppola es la más fiel al texto en cuanto a acción, pero la más alejada en espíritu. El director, que caería en otros errores, acertó al solucionar el simplismo de los personajes añadiéndoles aristas y complejidad y les dotó de una profunda psicología humana. Para ello, crea un Drácula atormentado e incluye, a modo de epílogo, una mezcla de mito, leyenda y realidad.
La secuencia inicial de Drácula de Bram Stoker (1992) que es el título completo del film, es una pequeña obra de arte en la que se nos narra la historia del Drácula real. Príncipe rumano, héroe cristiano contra los turcos que marcha a una guerra suicida y se despide de su prometida, Elisabeta. Drácula sale victorioso de una batalla que dura desde el alba hasta el anochecer (todas las batallas en el cine duran desde el alba hasta el anochecer) pero los vengativos turcos lanzan un mensaje atado a una piedra a las dependencias de Elisabeta comunicándole que su prometido ha perdido la vida en el campo de batalla. Elisabeta, creyéndole muerto, se arroja al río y se suicida, el guión de James V. Hart, toma algunos de los datos de la vida real de Drácula para, a partir de los mismos, crear un origen del personaje y explicar su psicología y sus actuaciones posteriores. A su regreso al castillo, Drácula descubre el destino de su prometida, un sacerdote le comunica que está condenada, pues el suicidio es un pecado mortal y el grita rabioso e iracundo reprochándole a Dios que le pague de esta manera todo lo que hace por su Iglesia y reniega de Él. Básicamente, lo que hace Ford Coppola es revivir el mito de Lucifer, el ángel más bello y amado de Dios que se revuelve contra Él, se rebela y es condenado a la oscuridad perpétua. Drácula es el héroe de la Cristiandad, con mayúsculas, pero su Dios le falla y él elige darle la espalda y autocondenarse a una muerte en vida. Es el origen del mito según James V. Hart y Francis Ford Coppola, y es tan básico pero al mismo tiempo tan intenso que no puede dejar indiferente y nos recuerda que no es un aficionado quién ha dirigido la película.
A partir de este momento, sabemos que es lo que ha sido de ese príncipe rumano. La película está ambientada en 1897, la época en la que fue publicado el libro, el cambio de siglo, y no es algo dejado al azar. El cambio de siglo significa el cambio de normas y valores, el cambio de principios que guían la vida, el surgimiento de nuevos hábitos, el cinematógrafo y la forma de ver la vida que impone. En contraposición a la moderna Londres, la rural y primitiva Transilvania hasta la que se desplaza Jonathan Harker; frente al bullicio de las calles de la metrópoli inglesa, la soledad de los Cárpatos y del castillo Drácula; frente a Jonathan Harker, abogado que parece tenerlo todo en la vida, un buen trabajo, juventud y una hermosa prometida, Drácula, un anciano quejumbroso que parece haberlo perdido todo, cuya última esperanza es absorber algo del espíritu de Londres, sólo y olvidado, el último vestigio de una noble estirpe (al igual que en la realidad, en la película, Drácula no tuvo nunca descendencia) Drácula descubre una foto de la prometida de Jonathan, ¿cree usted en la fuerza del destino? le pregunta el Conde. Mina, que así se llama la novia del abogado, es el vivo retrato de Elisabeta, su reencarnación, la ocasión del Conde de reconciliarse con Dios, la segunda oportunidad que le brinda la vida.
Desde este momento comenzamos a percibir la profunda psicología del personaje, plasmada de forma brillante por Gary Oldman. Es un hombre enamorado, condenado por sus pecados y su soberbia, necesita huir junto a Mina-Elisabeta y redimirse, pero olvida que él no está vivo, que es un ser sobrenatural y que pertenece a otro mundo, por otro lado es un hombre consciente de que Jonathan Harker es el obstáculo a sus sueños, cruel, sádico y vengativo, un ser sin escrúpulos que será capaz de cometer las atrocidades más aberrantes con tal de conseguir sus propósitos. No son estas las únicas oposiciones que guían el relato de la película de Ford Coppola. La historia comienza planteando la dualidad entre los personajes femeninos radicalizándola respecto del libro. Mina es la doncella pura y virginal, Lucy la lujuria personificada, por supuesto, la primera en caer en la oscuridad es la libidinosa Lucy, que será vampirizada por Drácula. Como dirá en un momento de la película el profesor Van Helsing ella es una puta de Satanás porque Lucy es la mujer sin pudor sexual, en oposición a la dulce y sumisa Mina, todo castidad y candor.
Pero Drácula de Bram Stoker no es una película de los 50 ni se tiene que amoldar al código Hays, por eso mismo tiene que haber un giro que desmonte los estereotipos femeninos. Tras conocer al conde, algo en su interior empuja a Mina hacia él, algo a lo que intenta resistirse, a este impulso animal a esta atracción visceral, Mina intenta contraponer el amor cristiano que siente por Jonathan, pero toda resistencia termina fracasando ante el magnetismo oscuro del príncipe.
Lucy es enterrada con el traje que iba a vestir el día de su boda. Se levanta de la tumba y rapta niños de sus cunas para alimentarse con su sangre. Hasta la cripta en la que ha sido enterrada se desplazan Van Helsing y los tres pretendientes de la joven, el doctor Seward, Quincey y su prometido, Arthur, a éste último es a quien corresponde matar al ser en el que se ha convertido Lucy. El marido (que nunca llegaría a ser) es el que ajusticia a su lujuriosa y adúltera esposa, que lleva el traje de novia, blanco radiante, puro, corrupto sólo por el rojo de la sangre que la ha condenado, una escena tremendamente simbólica.
Tras conocer al conde, algo en su interior empuja a Mina hacia él, algo a lo que intenta resistirse, a este impulso animal a esta atracción visceral, Mina intenta contraponer el amor cristiano que siente por Jonathan, pero toda resistencia termina fracasando ante el magnetismo oscuro del príncipe. En la película, cuando Drácula atraviesa un momento de debilidad y decide no vampirizar a Mina porque la ama demasiado para condenarla a lo que él está pasando, ella pide voluntariamente su bautizo de sangre: Quiero ser lo que tu eres, ver lo que tu ves, amar lo que tu amas, aléjame de esta muerte. Mina pide participar de este proceso a pesar de haber vivido la experiencia de Lucy ¿o precisamente por eso?
Hacia el final de la película, Mina ha cambiado radicalmente, es obligada a ayudar a Jonathan, Van Helsing, el doctor Seward, Arthur y Quincey a perseguir al Conde, intenta seducir a Van Helsing para desbaratar sus planes y, al final, con el conde malherido, agónico, escoge voluntariamente la condena, abandona a su esposo y a los amigos que la han protegido del mal, abraza su cruz y entra en el castillo con el Conde moribundo.
Es un final radicalmente distinto del de la novela. En el Drácula que escribió Bram Stoker, la forma de salvar a Mina, es matar al vampiro que la infectó, Mina es una dama a la que los caballeros han de salvar. El final de la película de Francis Ford Coppola es mucho más negativo, más apocalíptico. Aunque el Conde muera, Mina está infectada, y se convertirá en vampiro. A pesar de que el Conde muera, Mina no volverá jamás con Jonathan, ni volverá a Londres junto a los hombres que la ayudaron a vivir, porque al llegar a Transilvania, ha llegado a su hogar.
Las últimas escenas tienen lugar en la capilla del castillo, con un Drácula malherido y agonizante, estertorando sangre y una Mina dolorida, que asiste con angustia al sufrimiento de su amado. James V. Hart, el guionista, se muestra misericordioso con los pecados de Drácula, dame paz le pide el Conde a Mina, está cansado, harto, quiere terminar, y con el mismo machete con que le han herido de muerte, Mina le corta la cabeza. El mismo Hart que decide perdonar los pecados del príncipe se intuye cruel y condenatorio para Mina, el período de condena que se abre ante ella nos hace presagiar una soledad y un dolor similares a los que el Conde pasó. Porque, aunque la película termina en ese momento y no sabemos nada más de los personajes, no parece lógico un final que no suponga el abrazo total y definitivo de Mina a su condena, la soledad y la angustia eternas para la mujer que eligió voluntariamente alejarse de la vida. Es la consecuencia de sus palabras aléjame de esta muerte la dualidad inmortalidad-condena. La muerte es algo natural, el ser humano que la evita o desea evitar, deja de ser humano, en la literatura, el cine y el arte, los que consiguen esquivar la muerte abrazan una vida de soledad y tortura; lo mismo que sucede con Mina en la película.
El final supone el pesimismo total, para ella no habrá descanso. Y aquí radica la belleza del Drácula de Francis Ford Coppola, esa oposición radical al espíritu de la novela, esa negativa a aceptar clichés y estereotipos que eran válidos a finales del siglo XIX pero que no podían aceptarse en los 90. Esa visión particular de lo que es monstruoso.
El Drácula de Francis Ford Coppola es, como fue el Drácula de la vida real, un ser humano, director y guionista han conseguido desligar la imagen del hombre de la del ser literario que creó Bram Stoker. Le han dado volumen, vida, psicología. A pesar de todo, la figura creada por Bram Stoker, ilustrada por Bela Lugosi e interiorizada por todos nosotros, el vampiro que aprovecha las sombras de la noche para atacar a sus víctimas, pero al que se puede atacar provisto de crucifijos, estacas y ajos, permanecerá por siempre en nuestro ideario cultural, pues aunque sea fruto de la imaginación, para todos nosotros es la imagen del vampiro, del no muerto, es ese personaje enigmático, terrible e increíblemente atractivo que no muere nunca, elegante en el vestir, misterioso en sus miradas y felino en sus movimientos que todos alguna vez hemos fantaseado ser.
Supongo que estaréis al corriente de lo sucedido con es-israel.org. Tania posteó una filmografía de Natalie Portman en la que para hacer la gracia decidió insultarla aludiendo al hecho de que nació en Israel.
En seguida llovieron las quejas desde es-israel.org llamándonos "nazis" y "exigiendo" la retirada del post.
En un primer momento retiré todo aquello que pudiese resultar ofensivo y, más tarde, para evitar problemas a Roge, lo retiré todo.
Pero hoy he entrado en la web en cuestión... y no soporto que nadie me llame nazi (allí lo hacían) por lo que he decidido revisar bien el blog entero, eliminar todo rastro de lo que pueda parecer ofensivo y volver a colgarlo, porque, una vez fuera los insultos y descalificativos, a nadie puede ofenderle un post sobre Natalie Portman ¿no? o un lobby nos va a decir que podemos y que no podemos publicar???
Llamarnos nazi a Tania o a mi es como llamar comunista a Fraga, por cierto, también se considera una injuria* llamar nazi a una persona no?, e incluso según el jurista, una calumnia**, Artículos 205 a 210 del Código Penal (todos lo conocemos, algunos, incluso, lo tenemos que estudiar)
Así que voy a revisarlo y aunque queda más anticuado que la Montiel el post se publica, eso sí, todo aquello que pueda ofender será eliminado. Soy el primero que no quiere hacer daño a nadie.
Que quede claro que si los responsables de es-israel.org hubiesen sido educados y lo hubiesen pedido amablemente, yo hubiese sido el primero en retirar de buena manera todo aquello que pudiese ofender, como, de hecho, lo hice, pero no soporto que me insulten, ni a mi, ni a Tania, y menos, que me obliguen a quitar una información que no considero ofensiva.
Omito la opinión que me merecen los lobbies en general y éste en particular, pero quede clara desde aquí mi postura de rechazo ante cualquier tipo de opresión estatal sobre minorías: la nazi sobre el pueblo israelí, la israelí sobre el pueblo palestino...
* injuria: insulto o descalificación a una persona
** calumnia: imputación de un delito a otra persona.
Natalie Portman nació en Jerusalén en 1981
"...Moi je mappelle Lolita
Collégienne aux bas
Bleus de méthylène
Moi je mappelle Lolita..."
Léon (a.k.a The Professional) 1993 Luc Besson (Mathilda) - ¡Que guarrilla!
Con solo 12 años y ya toda una Lolita. Gary Oldman se sale.
Developing 1994 Marya Cohn (Nina) - Es un corto, un dramón que te cagas sobre una madre soltera que tiene cancer y la hija tiene que cuidarla, creo...
Beautiful Girls 1995 Ted Demme (Marty) - Me encanta esta peli. Timothy Hutton, Michael Rapaport, Mira Sorvino, Uma Thurman, Matt Dillon, Rosie O'Donnell, Lauren Holly ... Un reparto de la polla... Y ésta nuevamente haciendo de Lolita (la Lolita del barrio).
Heat 1995 Michael Mann (Lauren) - Robert De Niro y Al Pacino, mis dos actores favoritos (si tuvieran 30 años menos...). Hace de la hija adolescente incomprendida y suicida de Al.
Mars Attacks! 1995 Tim Burton Taffy (Dale) - ¡Que gamberrada de peli! Es una pollez enorme pero hay que verla. La muerte de Michael J. Fox a los 15 minutos de empezar la peli me traumatizó. El final es muy propio de los americanos.
Everyone says I Love You 1996 Woody Allen (Laura) - Musical... pero es del Woody... pero... sale Julia Roberts... pero sale la rubia bollera de American Pie... vamos... que no está mal, y te ries un poco.
Star Wars: Episode I 1997 George Lucas (Amidala/Padmé) - Esta peli en realidad no existe.
The Diary of Anne Frank 1998 James Lapine (Anne Frank) - Es una obra de teatro.
A cualquier otro lugar 1998 Wayne Wang (Ann August) - Es una peli algo aburridilla, muy lenta y aqui la niña ya empieza a tener más protagonismo. Pero merece la pena, Susan Sarandon (pedazo de actriz con un par bien puestos) haciendo de madre pirada.
La fuerza del amor 1999 Matt Williams (Novalee Nation) - Es una ñoñeríiiiiaaaaaa. Aunque, para que voy a mentir, me gustó, y mucho... ¡Y Ashley Judd tiene unos ojos impresionantes!
rubio, y le sienta fatal, le roba los planos). Y sale también la morena de Grease, Ritzo, la que se queda preñá.
Star Wars: Episode II 2000 George Lucas (Amidala) - Esta peli tampoco existe.
Zoolander 2000 Ben Stiller (Natalie Portman) - Hace un cameo. No, no hay sexo. Cameo es cuando un actor aparece como "invitado" en la peli con un pequeño papel. La peli... en fin... es una pollez, pero a algunos les gusta asi que.. no diré más.
La gaviota 2001 Mike Nichols (Nina) - Es una obra de teatro también. Junto a Meryl Streep y Kevin Kline, entre otros. Interesante... Va de una niña a la que llevan a un lago. Ella ama el lago y es libre como una gaviota (increible) y entonces llega un tío y la destruye (muy típico). No creo que nunca vea la obra pero... ni ganas.
True - Paris, je t'aime 2002 Tom Tykwer (Francine) - Cortometraje. 20 historias amorosas ambientadas en París de 5 minutos de duración cada una. Ella hace de una estudiante que deja a su novio, un joven ciego, y entonces éste empieza a revivir los momentos juntos y toda esa mierda. En fin, muy bonito
Cold Mountain 2002 Anthony Minghella (Sarah) - Es una especie de Odisea. Un soldado que después de finalizar la guerra de secesión tendrá que atravesar muchos caminos hasta llegar a su casita. Seguramente se cruce con la pava esta y se la folle, fijo. El prota es Jude Law. Y también salen Nicole Kidman y Renée Zellweger. Habrá que verla.
Garden State 2003 Zach Braff (Samantha) - No sé muy bien de qué va, pero creo que es un romance-adolescente-depresivo, o algo.
Star Wars: Episode III - Esta peli tampoco existe. Y todos sabemos de sobra quién es el director.
Closer 2004 Mike Nichols Alice (una stripper) - Junto a Julia Roberts y Jude Law. El director me gusta... La veré cuando salga.
De todas estas pelis la única que verdaderamente merece la pena ver es León, el profesional.
Escuchando: La marcha imperial
Meví aí al baño... tiki tiki tiiiiii
Esto es to, esto es to, esto es tooodo amigos
P.D.: Roge espero que no te importe, retiro de la portada la tercera parte de lo de Drácula para colgar esto, mañana publicaré lo del chupasangre. Siento mucho que te hayamos dao problemas. Un saludo
Ahhh estoy de exámenes hasta la coronilla, imagino que como todos vosotros... junio es un mes propicio para que la media de "pajillas" se eleve, ya sabéis... estudiando en la habitación encerrado, la tensión de los exámenes, la obligada soledad... lo normal... por eso me lo he pensado muy mucho a la hora de elegir al maromazo del mes.
Al principio pensé que debía ser un mes sin maromazo por aquello de no calentar más el ambiente... pero después he pensao que debía ser un maromazo sugerente, por aquello de que la manera más rápida de eliminar la tentación es caer de lleno en ella. Pues eso... ahí van estos dos pa que disfrutéis, y ya sabéis, dentro de poco Tania será la maromaza del mes... (a ¿Qué no era Tania? que siiii que Tania me sustituye... hagamos una cosa, seamos democráticos, ¿quién preferís que pose desnudo en Lo vuestro ya es vicio? Tania o Yo???)
Se llama Santi y es un tigre blanco mu mariquita mu mariquita, ¿la prueba? situad el ratón cerca de su culo, pulsad y ved la cara de satisfacción que pone... cuando he visto su reacción ante la estimulación anal no he tenido más remedio que adoptarle y que llamarle Santi... (juas juas juas)
Queredle, mimadle y dadle placer...